Por Fanny Yépez
Maximiliano Cortázar, el mismo que en la administración de Felipe Calderón operó un presupuesto de 32 mil millones de pesos para campañas publicitarias quien se sumó al primer círculo de Xóchitl Gálvez, y se convirtiera en pieza clave de la guerra sucia, éste quejó que en la pasada contienda electoral no tuvieron el suficiente apoyo económico del PRI y del PAN.
En entrevista en el estudio con Ciro Gómez Leyva, Max Cortázar, vice coordinador de la campaña presidencial de Xóchitl Gálvez, habló sobre la campaña de la malograda candidata Xóchitl Gálvez, sobre los números finales de la elección presidencial, sobre los datos de las encuestadoras, y mencionó la llamada que hizo la candidata Xóchitl Gálvez a Claudia Sheinbaum reconociendo su triunfo, y tener un breve diálogo entre ellas, y ahí fue cuando reconoció que sí hubo enojo por parte del líder nacional del PAN, Marko Cortés.
No hubo el dinero que se necesitaba
Max Cortázar comentó que Marko Cortez mostró su enojo por dicha llamada, y que además no tuvieron el suficiente apoyo económico por parte del PRI y del PAN y finalmente hizo una reflexión sobre cuáles habrían sido las causas de la derrota en las urnas, y consideró que se deberá hacer ahora en adelante, es sobreponerse a la contundente derrota.
Todo esto ocurre mientras el Partido Acción Nacional se desmorona y arrecia el enfrentamiento entre los líderes de este instituto político en el reparto de culpas por las derrotas, Marko Cortés dirigente del PAN, lamenta que la confianza en el Partido vaya en declive, por ello acepta que tienen razón los exdirigentes al exigir se haga una autocrítica para evolucionar y erradicar los errores: “Tristemente desde el año 2000, con el triunfo de Fox, ha disminuido en el porcentaje de votación” con esta frase lapidaria cerró una entrevista el represente del panismo nacional.
En contraparte Marko Cortez en su defensa explicó que el dinero que se aportó a la campaña de Xóchitl Gálvez: «El PAN fue el que más gastó en la campaña presidencial y todos los espectaculares fueron para Xóchitl»; sin embargo, señala, había otros candidatos.
También los ex gobernadores del PAN se subieron al ring y exigieron al dirigente albiazul, Marko Cortés, un cambio en las estrategias del partido y una renovación para afrontar la nueva realidad política.
En su pronunciamiento, el número cabalístico de 13 ex mandatarios panistas admitieron que la ciudadanía no los consideró opción para la Presidencia ni para la mayoría de los cargos federales y locales que se disputaron el 2 de junio.
Los ex gobernadores no hablaron de fraude electoral, ni mucho menos de impugnación. “La votación que obtuvimos muestra una franca tendencia declinante y constante a la baja. El mensaje de nuestro pueblo es contundente y claro. Al PAN nos gritó fuerte: cambias o te vas.
Reconocieron en una autocrítica que “El PAN debe cambiar y actualizar su proyecto político a las realidades del Siglo XXI que vivimos, priorizando la seguridad, la superación de la pobreza y el logro de la equidad social”, señala el mensaje.
Entre los firmantes están Ernesto Ruffo, ex gobernador de Baja California y primer mandatario de oposición al PRI en 1989; los ex mandatarios de Guanajuato, Carlos Medina; de Jalisco, Francisco Ramírez Acuña; Alberto Cárdenas, de Chihuahua; Francisco Barrio y Fernando Canales, de Nuevo León, y de Morelos, Marco Adame.
