Gelmin Omar González Hernández
Agencia Reforma
Ciudad de México, 21 diciembre 2024.- México perdió la disputa comercial por el maíz genéticamente modificado (GMO) contra Estados Unidos, ya que el panel concluyó que las medidas del País no se basan en la ciencia y socavan el acceso al mercado.
El Gobierno estadounidense pidió en 2023 un panel de resolución de controversias ante su desacuerdo sobre la decisión de México de prohibir el uso de maíz transgénico en la harina y masa para la elaboración de tortillas, alegando que no estaba basada en ciencia y violaba los compromisos del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
México tiene 45 días para cumplir con las conclusiones, contados a partir del 20 de diciembre, fecha en la que el panel emitió su informe final a las partes.
«El panel del T-MEC estuvo de acuerdo con Estados Unidos en las siete reclamaciones legales, y concluyó que las medidas de México no se basan en la ciencia y socavan el acceso al mercado que México acordó proporcionar en el Tratado», indicó en un comunicado la Oficina de la Representante Comercial estadounidense (USTR).
Por su parte, el Secretario de Agricultura de ese país, Tom Vilsack, aseguró que las medidas de México contradecían décadas de evidencia que demostraban la seguridad de la biotecnología agrícola.
El panel que perdió México se refiere a dos medidas que introdujo vía decreto presidencial.
Una es la orden de «revocar y abstenerse de expedir autorizaciones para el uso de grano de maíz genéticamente modificado para consumo humano».
La otra es la instrucción a las autoridades de «llevar a cabo las acciones que conduzcan a lograr la sustitución de maíz genéticamente modificado para alimentación animal y uso industrial para consumo humano».
Juan Carlos Anaya, director general del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), mencionó que la resolución del panel subraya que, si bien México buscó proteger la biodiversidad y la salud pública, no cumplió con las normas científicas y comerciales internacionales requeridas por el T-MEC.
Indicó que el País deberá eliminar el decreto y confirmar que permitirá la importación de maíz OGM para consumo animal e industrial, aunque puede mantener la política de prohibir la siembra de maíz transgénico en el territorio nacional.
De hecho, el Gobierno confirmó ayer que impulsará la prohibición legal de la siembra del maíz transgénico en México, ya que el panel solo regula la importación.
Acata Gobierno decisión, aunque no la comparte
México manifestó que no está de acuerdo con la determinación del panel, pero la respetará en el marco de los compromisos del T-MEC.
«El Gobierno de México no comparte la determinación del panel, pues considera que las medidas cuestionadas están alineadas con los principios de protección a la salud pública y los derechos de los pueblos indígenas, establecidos en la legislación nacional y en los tratados internacionales de los que es parte.
«A pesar de ello, el Gobierno de México respetará la determinación, ya que el sistema de solución de controversias del T-MEC es una pieza clave de dicho tratado», expresaron en un comunicado conjunto la Secretarías de Economía (SE) y de Agricultura (Sader).
Gabriela Siller, directora de Análisis Económico en Grupo Financiero Base, advirtió que más adelante se podrían dar a conocer sanciones para México como medida compensatoria por limitar el acceso a sus socios de Norteamérica a una parte del mercado interno de consumo de maíz.