París, Francia 6 agosto 2024.- Marco Verde venció por decisión dividida al británico Lewis Richardson en las semifinales de París 2024, y consigue el pase a la final olímpica por el oro.
El estadio Roland Garros cambió la arcilla por guantes, las redes por cuerdas y a los tenistas por boxeadores. Cambió el silencio de los sets por los alaridos de la arena típica del box. El público alentó al pugilista azteca para un singular ambiente.
El británico brincaba antes de salir al ring, con ansioso ímpetu; Marco estaba sentado con la mirada hacia abajo, apenas volteó, solo para ver la cámara y subir la guardia.
En el primer round dividieron tarjetas, el sinaloense no perdió su estilo agresivo de ir al frente, pero con la mesura que le otorga escuchar la esquina. Ambos pugilistas subieron al encordado mesurados, pero sin dejar de lanzar rectos cortos.
El segundo round subió de tono y Verde Álvarez se notó en una posición desfavorable, recibió zurdazos en la cara y combinaciones de golpes para que los jueces decidieran a favor del europeo.
Pero con la inteligencia deportiva para descifrar rivales que caracteriza al mexicano,
Para el último asalto, el mexicano sorprendió peleando con inteligencia y buen box, se fue al frente con rectos, ganchos, en distancia media y corta. El mazatleco cubrió con su técnica la pelea y con el embate se agenció las tarjetas del último round de forma unánime.
“La estrategia fue empezar un poco a distancia media, si nos ocupamos en meter la corta, o sea, golpes abajo muy importantes porque había momentos, creo que, en el segundo round, cuando arranque no lo alcancé, y no tiré tanto abajo y pues ya ahí empecé en el tercero a picar un poquito más abajo”, comentó sobre su estrategia al finalizar el combate.
El vínculo entrenador-deportista, lució al obedecer la estrategia de Radamés Hernández, el conocimiento de su pupilo ha sido fundamental para que el boxeador ahora dispute una final olímpica.
“Vengo con él desde Centroamericanos y del Caribe, Juegos Panamericanos, en todos los torneos siempre llego y le marco antes de subir a la pelea para saber cómo va a ser la pelea y estoy enfocado en eso. Me ha dado resultados y pues ya más de 10 años, ya me conoce, hasta cuándo tiro un mal un golpe o que bajo poquito la guardia”, aseguró Marco Alonso.
La final olímpica será el 9 de agosto cuando enfrente al uzbeko Asadkhuja Muydinkhuajaev y de nueva cuenta buscará hacer historia en el estadio Roland Garros.
