• El empresario potosino usa al rector Alejandro Zermeño Guerra para obtener beneficios económicos, propiedades y acciones de la institución educativa

San Luis, SLP, 1 mayo 2025.- Después de haber sido evidenciado por el imperio de corrupción que maneja a través de sus distintos negocios, el empresario potosino, Miguel Maya Romero, ahora es señalado por ser el operador principal de las decisiones que se toman en la Universidad Autónoma de San Luis Potosí (UASLP), por lo que el rector Alejandro Zermeño Guerra se habría convertido en su títere para obtener, a través de él, toda clase de beneficios a costa de la reputación de la institución educativa.

Lo anterior se constata tras darse a conocer una denuncia penal que la empresa Distribuidora VEM S.A. de C.V. realizó en contra de Maya Romero, Zermeño Guerra, Urenda Navarro, quien es la abogada general de la UASLP, y Jesús Ortiz, columnista del medio digital Astrolabio, (propiedad de Miguel Maya), quienes presuntamente estarían involucrados en fraude, extorsión, difamación, cohecho y asociación delictuosa para afectar las negociaciones entre inversionistas del proyecto inmobiliario que la UASLP llevaba a cabo con VEM.

Miguel Maya habría dirigido toda una serie de reportajes, columnas periodísticas y posturas “distorsionadas” para persuadir a las autoridades de la UASLP y determinar, así, la rescisión del contrato. De igual forma, el también panista se habría reunido con el rector de la UASLP para “arreglar el asunto del arrendamiento», esto, al considerar muy bajo el costo pactado por la renta, por lo que le obligó a subir el precio y le pidió, además, “un porcentaje de las acciones” que de ahí saldrían.

De esta forma, Miguel Maya Romero estaría mostrando un doble discurso moral al fomentarse desde sus portales informativos como una persona de recto proceder plural y profesional, pero en su faceta más oscura, usa estos mismos medios para hacer negocios sucios torciendo la ley, desinformando a la ciudadanía y extorsionando, junto a Zermeño Guerra, a proveedores y particulares.

Instagram
WhatsApp