- La exposición Sobre los huesos de Cuauhtémoc y de Hernán Cortés. Diego Rivera y el gran debate sobre la mexicanidad continúa en el Museo Mural Diego Rivera
- Destacan La llegada. Hernán Cortés y sus huestes entran a Tenochtitlan, de Augusto Ferrer-Dalma y La plaza de Jesús con la Iglesia de Jesús Nazareno, de Carlo Prayer
Ciudad de México 11 enero 2025.- En el Museo Mural Diego Rivera, perteneciente al Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), se presenta, hasta el 16 de febrero, la exposición Sobre los huesos de Cuauhtémoc y de Hernán Cortés. Diego Rivera y el gran debate sobre la mexicanidad, que explora la disputa sobre la identidad nacional a través de obras de arte, como pinturas, esculturas, grabados y fotografías.
La exposición busca reflexionar sobre la construcción de la identidad y cómo el arte ha interpretado los eventos que definieron el destino del país. En una de sus secciones, se muestran dibujos, pinturas, fotografías y documentos que registran la polémica en torno al hallazgo de las osamentas de Cuauhtémoc y de Hernán Cortés, y su registro en las representaciones y las acciones que llevó a cabo el artista Diego Rivera.
Una de las piezas destacadas de la exposición es La llegada. Hernán Cortés y sus huestes entran a Tenochtitlan, obra de Augusto Ferrer-Dalma, realizada en técnica mixta (siglo XX), perteneciente a la colección Instituto Oviedo.
Esta obra retrata el momento en que el conquistador entra a la ciudad de Tenochtitlán. A caballo y acompañado por sus tropas, Cortés es recibido por una multitud de indígenas, algunos curiosos y otros expectantes.
La escena captura la mezcla de culturas, con los soldados españoles y la población mexica en una misma imagen. Los colores vibrantes y las banderas ondeando plasman la grandiosidad y el impacto de este momento histórico.
Luis Rius, curador de la muestra e investigador del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información del INBAL, comentó que se trata de una obra que pone de manifiesto que Cortés no llegó solo con sus hombres a Tenochtitlan, sino que contó con el apoyo de pueblos indígenas que se sentían oprimidos por los mexicas. “Es una visión contraria a la que tenía, por ejemplo, Diego Rivera, y por eso es importante en el contexto de una exposición que habla sobre el sentido de la mexicanidad”.
Señaló que se presentan diversas imágenes relacionadas con la llegada de Cortés a Tenochtitlan, como escudos de armas, personajes destacados y retratos significativos del conquistador.
Por otra parte, de Carlo Prayer, artista nacido en Italia en 1826 y fallecido en 1900, se presenta la obra La plaza de Jesús con la Iglesia de Jesús Nazareno (1851), óleo sobre tela de la colección del Museo Kaluz. La Iglesia de Jesús Nazareno es un templo católico ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de México, en la alcaldía Cuauhtémoc, y fue construido entre los siglos XVII y XVIII, con modificaciones en el siglo XIX.
En esta hermosa vista urbana de Carlo Prayer se observa el Hospital de Jesús y el templo anexo, la Iglesia de Jesús Nazareno, la cual alberga en la actualidad un mural de José Clemente Orozco y los restos óseos de Hernán Cortés. Cuando Prayer lo pintó, en 1851, no podía saber que en el muro derecho del altar de la iglesia se encontraban ocultos en un nicho, los vestigios del conquistador, porque se trataba de un secreto. Sólo lo conocían Lucas Alamán, el intelectual conservador que tuvo la idea de ocultarlos ahí y algunas personas más.
Tiene mucho sentido presentar esta pintura en cercanía con la copia en bronce del busto de Hernán Cortés que hiciera en el siglo XVIII Manuel Tolsá, al parecer en mármol, porque acompañó durante muchos años los restos de Cortés, en sus atribuladas inhumaciones y reinhumaciones. Ambos son símbolos de la hispanidad. El templo fue declarado Monumento Histórico el 29 de agosto de 1932.
La exposición Sobre los huesos de Cuauhtémoc y de Hernán Cortés. Diego Rivera y el gran debate sobre la mexicanidad puede visitarse de martes a domingo, de 10 a 18 horas en el Museo Mural Diego Rivera, ubicado en Colón s/n, esquina Balderas, Centro Histórico.