Cesar Esteban Flores Rodríguez
Agencia Reforma
Ciudad de México 13 junio 2024.- Ante la intentona oficialista de desaparecer al árbitro electoral en noviembre de 2022, los ciudadanos pasamos a la acción y la Marea Rosa apareció en la escena pública. A partir de entonces, los ciudadanos nos activamos para defender al INE, a la Suprema Corte, el voto libre y a la República. Las imágenes de las plazas públicas pintadas de rosa en la Ciudad de México, y de manera simultánea en más de cien ciudades de todo el País y el mundo, son un hito histórico.
La Marea Rosa es ahora un movimiento social en donde los ciudadanos encontramos un espacio para alzar la voz frente a un Gobierno que no escucha, no dialoga y no quiere construir de la mano de toda la población.
Hay que decirlo con claridad: en 2024 vivimos el proceso electoral más inequitativo de nuestra historia reciente. La contienda fue absolutamente asimétrica. El oficialismo participó con todo el aparato del Estado. Para muestra un botón: el Presidente fue reconvenido por la autoridad electoral en más de 40 ocasiones a no intervenir, a lo cual hizo caso omiso. Lo que impactó el resultado de la elección no fueron las trampas de un día sino los abusos de 5 años y medio. Por el bien de México y su democracia no debe de repetirse nunca más una elección tan dispareja e injusta.
A pesar de ello, la derrota nos obliga -con entereza- a reflexionar, aprender y mejorar. También a exigir y actuar para salvaguardar nuestra democracia y libertades y para que sean atendidas la pobreza, la desigualdad, la violencia y la injusticia.
Las seis organizaciones que conformamos UNID@S -convocante de la Marea Rosa- proponemos construir, entre todas y todos, un País en donde las palabras Libertad e Igualdad sean la brújula que guíe nuestro camino. Desde la Marea Rosa seguiremos defendiendo sin descanso ni tregua, las causas que nos dieron origen.
¿Qué sigue en los próximos meses para la Marea Rosa?
- Exigir que se aclaren las irregularidades de la jornada electoral y que se solventen las impugnaciones.
- Combatir la sobrerrepresentación que constituye un fraude a la Constitución. Ninguna Coalición puede tener mayor representación de lo que los ciudadanos decidimos en las urnas. No debemos permitir que tramposamente se generen mayorías artificiales con las cuales buscan inhibir el diálogo y la construcción de acuerdos.
- Defender la República, en particular la democracia, la división de poderes y las libertades que pretende vulnerar el Plan C.
Dicho plan establece la elección directa de Ministros, magistrados y jueces del Poder Judicial; contempla la desaparición o debilitamiento del INE; pretende el aniquilamiento de diversos organismos autónomos (INAI, IFT, Cofece, CRE y CNH); eliminaría la representación proporcional en el Congreso e integraría a la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa.
Para atender este punto debemos exigir de los diputados y senadores de Oposición una férrea defensa de la legalidad y las instituciones en el Congreso Federal. También tenemos que estar listos y dispuestos a salir a las calles a defender lo que siempre hemos defendido.
- Exigir un presupuesto 2025 para que nadie se quede atrás.
- Defender a la Suprema Corte y la división de poderes, mediante la selección de un Ministro o Ministra profesional y libre de sujeciones partidistas.
Por lo anterior, la lucha de la Marea Rosa es hoy más indispensable que nunca. Tenemos que mantenernos unidos, en pie de lucha, alertas y con buenos reflejos.
El resultado electoral le da a MORENA la responsabilidad de escuchar, dialogar y construir acuerdos por el bien de México. La polarización no le sirve a nadie. Recordemos que 65 millones de personas no votamos por esa opción política y tenemos voz, derechos y libertades. Si la candidata ganadora en verdad ofrece un Gobierno democrático para todos, deberá recuperar la confianza social con hechos.
En esta nueva etapa del acuerdo ciudadano-político, la Marea Rosa debe darse el tiempo necesario para el diálogo y la reflexión en todo el País. Sólo así será capaz de innovar y contribuir a la construcción de una alternativa de esperanza para todas y todos. Lo decimos claramente, la Marea Rosa no es ni será un partido político porque nuestro partido son nuestras causas, nuestro partido es México. La Marea Rosa es una fuerza ciudadana actuante por el bien de México que debemos animar, fortalecer, organizar y empoderar. Eso requerirá de visión y de mucha generosidad.
México es enormemente resiliente. Aprendamos de nuestra historia y de nuestro presente y sigamos adelante con ánimo y esperanza renovados.
¡Vamos por un México en donde nadie se quede atrás!
¡Vamos por una alternativa de esperanza para todas y todos!
*UNID@S, organización convocante de la Marea Rosa.