Ciudad de México, 15 diciembre 2024.- Klebsiella oxytoca BLEE positiva ha emergido como una preocupación significativa en los hospitales debido a su resistencia a los antibióticos y su capacidad para causar infecciones nosocomiales graves. Esta bacteria, que produce beta-lactamasas de espectro extendido (BLEE), presenta desafíos únicos en términos de tratamiento y control en entornos de atención médica.

Características y resistencia

“Klebsiella oxytoca BLEE positiva produce enzimas que confieren resistencia a muchos antibióticos beta-lactámicos, incluyendo penicilinas y cefalosporinas. Esto dificulta el tratamiento, especialmente en pacientes vulnerables,” explicó el Dr. David Díaz Santana, Médico Epidemiólogo con Doctorado en Salud Pública. Además, su capacidad para adherirse a superficies y formar biopelículas en dispositivos médicos, como catéteres, incrementa el riesgo de infecciones asociadas a la atención de la salud.

Diferenciación y virulencia

En comparación con otras enterobacterias, “Klebsiella oxytoca BLEE positiva tiene un mecanismo de resistencia más amplio y una virulencia que le permite evadir el sistema inmunológico del huésped con mayor facilidad,” destacó el Dr. David Díaz Santana. Además, su capacidad para adquirir genes de resistencia adicionales la hace particularmente desafiante.

Vías de transmisión y mitigación

La transmisión de Klebsiella oxytoca en entornos hospitalarios ocurre principalmente a través del contacto con superficies contaminadas, equipo médico y las manos del personal de salud. “El lavado de manos, el uso de equipo de protección personal y la limpieza rigurosa de materiales son medidas esenciales para prevenir su propagación,” explicó el experto. Además, enfatizó la importancia de las políticas hospitalarias para garantizar el uso único de dispositivos desechables.

Protocolos de prevención

Para evitar la transmisión de enterobacterias, el Dr. David Díaz Santana recomendó “seguir estrictamente las normas de higiene, adherirse a los protocolos de aislamiento descritos en la Norma Oficial Mexicana 045 y en el Manual de la Red Hospitalaria para la Vigilancia Epidemiológica (RHOVE), y realizar auditorías regulares.” También resaltó la necesidad de utilizar indicadores de proceso y resultado para monitorear la efectividad de estas medidas.

Impacto en los tratamientos antibióticos

La resistencia de Klebsiella oxytoca BLEE positiva reduce las opciones de tratamiento, obligando al uso de antibióticos de última generación, como los carbapenémicos. “La selección debe basarse en pruebas de sensibilidad antimicrobiana para asegurar la efectividad y minimizar la resistencia futura,” destacó el experto.

Educación y formación del personal

Para mejorar la prevención, “los programas de capacitación continua, las simulaciones prácticas y la promoción de una cultura de seguridad entre el personal de salud son fundamentales”, agregó el Dr. David Díaz Santana. Estas iniciativas ayudan a garantizar el cumplimiento de los protocolos y a reducir el riesgo de infecciones.

Resaltó que Klebsiella oxytoca BLEE positiva representa un desafío multifacético para los hospitales. La combinación de medidas preventivas, protocolos estrictos, educación continua y vigilancia es esencial para controlar su propagación y proteger la seguridad de los pacientes.

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