- Redujo en 50% la solicitud del vital líquido proveniente de El Realito, mientras que agua de las presas San José, El Peaje y El Potosino se pierde en la evaporación
A pesar de que, desde el inicio de la temporada de lluvias y huracanes, en mayo pasado, las presas de San Luis Potosí llegaron a su tope máximo, incluso fue necesario su desfogue, el INTERAPAS de Enrique Galindo ha privilegiado la sobreexplotación del acuífero, vedado desde 1961 por la federación.
Antes de la sequía que afectó todo el país y la llamada crisis hídrica que secó gran parte de los embalses en el territorio potosino, el INTERAPAS solicitaba 450 litros por segundo de agua proveniente de la presa El Realito en Guanajuato, ahora que todo se normalizó disminuyó la solicitud de agua a sólo 200 litros por segundo, el resto lo extrae de pozos.
Durante más de una década la Presa El Peaje estuvo fuera de servicio, sin embargo, luego de su reparación por parte del Estado, logró captar agua y su capacidad alcanza casi el 100%.
Según datos de la CONAGUA, las Presas ubicadas en la capital potosina almacenan gran cantidad de agua: San José: 87.5%, El Peaje 97.3%, El Potosino 88.3% y la Cañada del Lobo 62.1%, toda esta cantidad de agua podría abastecer gran parte de la zona metropolitana durante varios meses, lo que le daría un respiro al acuífero, lamentablemente el agua se pierde en evaporación, ya que no es utilizada por el INTERAPAS del alcalde viajero.
Durante la sequía y la crisis hídrica los pozos se convirtieron en la única opción para abastecer de agua a los hogares de San Luis, Soledad y Cerro de San Pedro, sin embargo, ahora que las presas están llenas lo idóneo sería permitir que se recargue el acuífero, lo que no ha pasado.
Ante el hecho que podría ser catalogado de ecocidio, grupos «ambientalistas» han guardado silencio. No se ve a los académicos de la UASLP, ni a los del Colegio de San Luis o siquiera el Consejo Estatal Hídrico, todos guardan cómplice silencio mientras el acuífero se agota y el agua que se extrae va cargada de metales pesados y microplásticos.