- El espacio dedicado al relato llegó a su edición 18, consolidándose como una sección que siempre sorprende y enriquece
Guadalajara, Jalisco, 6 diciembre de 2024.- El Encuentro Internacional de Cuentistas ya es un adulto: este año llegó a su edición 18, que comenzó actividades el jueves 5 de diciembre consolidándose como un territorio al que el público de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara le guarda una gran estima por su formato, por la pluralidad de voces y la capacidad de Alberto Chimal, a cargo de la curaduría de la sección, para llevar con humor y originalidad un formato de encuentro dedicado al relato breve.
En la primera sesión compartieron la mesa, por parte de México, Elma Correa y Brenda Lozano, junto con el español Eloy Tizón. Este espacio tiene la particularidad de editar, anualmente, una antología de bolsillo con las biografías, en primera persona, de los participantes, los decálogos o recomendaciones de cada uno en torno a la realización del cuento y el texto al que darán lectura al iniciar la sesión antes de pasar al diálogo directo con los asistentes. Así, el humor, el intercambio, las preguntas directas y los comentarios puntuales son bienvenidos para dar paso a la conversación.
Las de Tizón, por ejemplo, parten del hecho de entender al cuento como “un arte de disidentes”, género en el que reconoce que más que escribirlos, los persigue; en el caso de Correa, ella enfatiza la importancia de divertirse y “no tomarse tan en serio”.
Los textos que las y los autores envían para el compilado pueden ser inéditos o publicados o, como en el caso de Brenda Lozano, la historia que compartió fue incluida en la exposición Tunstate, de la artista turca Aslı Çavuşoğlu, montada en el Museo Jumex de Ciudad de México, en 2023.
Siendo el cuento un punto de revelación para situaciones, personajes y sorpresas, también es un imán de encuentros, como uno de los espectadores, llegado de Brasil, quien visitaba la Feria por segunda ocasión, luego de haber estado en ella en 2014. Aquella vez conoció como autor a Tizón y ahora, a su regreso, vuelve a encontrarlo para felicitarlo por sus cuentos.
Una parte destacada de la primera sesión del encuentro es el modo en que algunos de los asistentes, en su calidad de lectores, plantearon preguntas sobre influencias o referencias de otros autores o narraciones sobre la propuesta que brindaron y relataron cómo se fueron vinculando a ellas.
Por el eco que podía tener la estructura del relato de Tizón, que un lector asociaba a las reiteraciones de El Aleph, de Jorge Luis Borges, el autor comentó que el autor argentino era “la casa de todos. Su mirada impregna todo desde que él existe”. En la dinámica de las sesiones, contrastan las lecturas de los asistentes con las de los participantes y, de inmediato, surgen los nombres y recomendaciones de otras voces, otros autores y plumas, donde fluyeron muchos nombres de nuevas voces de mujeres que exploran la creación desde la narrativa o la poesía.
El invitado español reveló que en el proceso para armar una antología del cuento español del siglo XX ha entrado en contacto con historias excelentes de mujeres que no recibieron la difusión con la misma resonancia que los colegas varones de sus tiempos.
Otros lectores plantearon interrogantes a los invitados que acababan siendo desafíos, donde fueron retados para mencionar cuentos en los que podrían caer en la tentación de fantasear y encontrar alternativas para cambiarles el final. Eso dio pie para mencionar historias de Salinger o de Chéjov, incrementando el interés por las respuestas.
Como parte del ejercicio al que se presta el diálogo de ambos lados de la mesa se dio la oportunidad, a iniciativa de uno de ellos, de mencionar algunos de los placeres culposos que los definían. Las respuestas tuvieron la sorpresa que se puede esperar de algunas elecciones, por lo que Chimal consideró que esa parte de la sesión era “el equivalente literario de perrear hasta el piso”.
El Encuentro Internacional de Cuentistas prosigue con un par de sesiones los días viernes y sábado, a las 19:30 horas, en el salón 3 de la FIL Guadalajara, en sesiones que tendrán participantes de Argentina, México, España, Uruguay y Colombia.
