Imelda Robles                                    

Agencia Reforma

Monterrey, NL  5 junio 2024.- Ya pasaron las elecciones y haya ganado o no tu candidata o candidato, es hora de darle la vuelta a la página.

 

 La población tuvo meses intensos de campañas electorales con bombardeos de información. Era casi imposible hablar de política con familiares, amigos o compañeros de trabajo sin que alguien saliera enojado.

 

 Se trata de ahora construir juntos un mejor México: si ganó la persona por quien votaste, evita hacerle comentarios negativos a los del otro partido, y si por el contrario, no ganó tu persona favorita, no tienes por qué desanimarte.

 

 Especialistas en psicología y manejo de conflictos coinciden en que, independientemente de la candidata o candidato ganador, el verdadero cambio ocurre cuando cada uno se compromete con el bien común y hace lo que le corresponde.

 

  1. DEJA ATRÁS DIFERENCIAS

 

 Una relación familiar, de amistad o profesional tiene más valor que cualquier discusión o diferencia por temas políticos, señala Agustín Hernández, especialista en coaching ejecutivo, donde aborda el manejo de conflictos y diferencias.

 

 «Es importante poner en perspectiva que la vida ya tiene demasiadas complicaciones como para que le agreguemos una complejidad adicional y nada grata, distanciándonos o dejando por completo una relación por cualquier partido político», indica.

 

 «En el entorno de polarización que cada vez nos confronta más como personas, es importante que cada uno de nosotros seamos ese punto de conciliación al menos en nuestras familias, amistades y entorno profesional».

 

 María Guadalupe González, directora ejecutiva de Educando en Red, organización que promueve el bienestar integral y la salud mental de la niñez y juventud, llama a conectar con tu sentido de la vida, valores y propósito personal para dejar atrás diferencias políticas.

 

 Siempre puedes elegir tu respuesta ante lo que sucede.

 

 «Es también un ejercicio de autocontrol. Primero comprendemos nuestras propias emociones y, una vez entendiendo qué sucede en nuestro interior, elegimos el bien mayor, ejerciendo el autocontrol y empleando nuestra inteligencia para afrontar el conflicto», dice.

 

 «Podemos valorar y querer a personas aunque piensen de forma distinta a nosotros».

 

 En este punto, Angélica Limón, profesora de la Escuela de Psicología de la UDEM y doctora en investigación psicoanalítica, agrega que todos piensan diferente con base en su historia personal y es prioritario respetar cada diferencia aunque no coincidan contigo.

 

 La tolerancia, añade, es una habilidad que se desarrolla a lo largo de la vida y si te encuentras con una persona que tiene una posición radical en su punto de vista, lo más inteligente es no discutir con ella.

 

 «Nadie le va a ganar, va a ser muy difícil porque en su convicción nada más la verdad es suya», ejemplifica, «entonces nada más ahí es: ‘no, pues sí es cierto, ésa es tu posición, no hay más que discutir'».

 

 «Es muy diferente cuando te puedes sentar en la mesa con alguien inteligente que tolera que somos diferentes, que pensamos diferente y que puede decir: ‘no estoy de acuerdo contigo, pero te respeto'».

 

  1. ¿AHORA QUÉ SIGUE?

 

 La psicóloga González, de Educando en Red, te invita a preguntarte qué puedes hacer desde tu posición como ciudadano para lograr los cambios que deseas.

 

 «Participar activamente en la comunidad y en las causas que te importan, te permite seguir contribuyendo al cambio que deseas, independientemente de quién esté en el poder», señala.

 

 «La logoterapia sugiere encontrar significado en nuestras acciones y experiencias, incluyendo la manera en que respondemos a los desafíos políticos. Busca apoyo en amigos y familiares que compartan tus valores».

 

 Hernández, coach ejecutivo y consultor organizacional, comparte que México es mucho más que un candidato o candidata: es conformado por lo que cada uno hace a diario en su entorno.

 

 «La democracia tiene ese componente de ganadores y perdedores, y es importante tener claro que nuestra vida no se resuelve porque la persona por la cual voté ganó o no ganó las elecciones», recalca.

 

 «Si por quien votaste no ganó, no es el fin del mundo, enfócate en lo que está en tus manos, siéntete orgulloso de haber cumplido con la responsabilidad civil de salir a votar».

 

 La psicóloga Limón, de la UDEM, indica que más allá del color del Gobierno que está al frente, todas las personas tienen responsabilidades cívicas y son corresponsables de su entorno.

 

 «El ejercicio de tener una buena comunidad empieza desde uno, desde el autocuidado, desde ser un buen vecino, compañero, familiar», comparte Limón.

 

 Para un cambio positivo en tu vida, sugiere a nivel micro hacer una evaluación personal, revisar si eres congruente entre lo que exiges y lo que haces, y tener la humildad de reconocer tus errores. Ahí es cuando empieza el proceso de cambio.

 

III. ACCIONES PARA MEJORAR

 Hay acciones que todos los ciudadanos deberían hacer para contribuir a una mejor comunidad y País. González, de Educando en Red, comparte algunas:

 

 – Educación y automejora: Invierte en tu educación y desarrollo personal, lo que te capacita para contribuir de manera más efectiva a la sociedad.

 

 – Voluntariado y participación comunitaria: Involúcrate en actividades de voluntariado y en iniciativas comunitarias. Esto fortalece la comunidad y crea un impacto positivo.

 

 – Promueve la tolerancia y el diálogo: Fomenta un ambiente de tolerancia y diálogo en tu entorno. Esto contribuye a una cultura de respeto y comprensión mutua.

 

 – Cuida tu salud mental y física: Mantén en buen estado tu bienestar emocional y corporal, lo que te permite a estar más resiliente y efectivo en tus esfuerzos personales y comunitarios.

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