Jorge Ricardo y Mayolo López
Agencia Reforma
Ciudad de México 31 julio 2024.- El desmesurado aumento del presupuesto a las Fuerzas Armadas, que este año ejercerán 383 mil 673 millones de pesos, más transferencias directas y más las empresas que administran, no corresponde con la efectividad del combate al crimen, concluyó en un estudio la organización civil Causa en Común.
En 2022, por ejemplo, la Guardia Nacional tenía 128 mil 233 elementos, pero sólo hizo 2 mil 814 detenciones de presuntos criminales, menos que las realizadas por la Policía municipal de Celaya que contaba con 600 integrantes, señala.
A pesar de esto, el presupuesto entregado por el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador a los militares no ha dejado de aumentar.
La Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tiene este año 247 mil millones, 121 por ciento más que en 2023; la Secretaría de Marina (Semar), 68 mil millones, o 64 por ciento más que el año pasado, y la Guardia Nacional (GN), 67 mil 500 millones de pesos, 14 veces más que en 2020.
«No hay traducción entre el incremento de recursos y mayor eficacia operativa», dijo la presidenta de la organización, María Elena Morera, en la presentación del informe «Observatorio de la Guardia Nacional y la Militarización en México» en el Senado.
«¿Por qué ponemos en conjunto (el presupuesto)? Porque al final tres instituciones son Fuerzas Armadas, se colocan en el tercer presupuesto más importante únicamente por debajo de la Secretaría de Bienestar y de la Secretaría de Educación», agregó.
Morera junto con el senador Emilio Álvarez Icaza y la abogada Érika Ureña aseguraron que el combate al crimen no es la verdadera intención del Gobierno federal al impulsar la mayor participación de las Fuerzas Armadas en la seguridad pública, en detrimento de las policías, sino la imposición de una ideología militar.
«La militarización no solamente consiste en despliegues operativos y en despliegues en las calles y avenidas, sino lo más importante me parece que es la implementación de una ideología y de una lógica operativa de las instituciones castrenses hacia las instituciones civiles», dijo Morera.
«¿Por qué nos parece, como País, que es una buena idea que las Fuerzas Armadas administren aeropuertos, carreteras, ferrocarriles, empresas para distribuir medicamentos o que estén en la gestión y control migratorio?», planteó Álvarez Icaza.
El informe de la organización revela que la GN no está desplegada en los lugares con mayor delincuencia, pues en 2022 reportó 20 mil 605 efectivos en la Ciudad de México, mientras que en Zacatecas había sólo mil 402 en marzo de 2023.
